martes, 15 de octubre de 2013

Maturín mejor que nunca.

Esta bella ciudad, capital del estado Monagas, fue fundada como una misión capuchina por el fraile Lucas de Zaragoza, el 7 de diciembre de 1760 con el nombre de San Judas Tadeo de Maturín.
Mi último viaje a Maturín comenzó muy temprano en la mañana, porque esa es la hora ideal para tomar carreteras en Venezuela. Recorrimos kilómetros de paisajes preciosos, para llegar de nuevo a uno de los mejores lugares del oriente venezolano. Lo primero que hicimos fue recorrer el centro de la ciudad y su catedral, construida entre 1961 y 1982 en estilo románico, y con algunos de los vitrales más impresionantes que yo he visto en Venezuela. Pasamos por el monumento a Juana Ramírez, o Juana La Avanzadora, heroína patriota que defendió a la ciudad de los realistas en las guerras de nuestra independencia. Seguimos hacia una iglesia colonial preciosa, construida entre 1884 y 1887 en honor a San Simón, y desde allí nos fuimos a la Hacienda Sarrapial, sin salir de la ciudad, que es una vieja casona muy bien remodelada donde funciona la Corporación de Turismo del estado. La hacienda es muy bonita y vale la pena entrar, para conocer un poco de la historia de Maturín y del desarrollo del estado.
Después nos fuimos al hotel y me puse a leer unas páginas de la extensa biografía de Balzac escrita por el austríaco Stephan Zweig, hojeadas entre el sopor delicioso del aire acondicionado helado, una buena ducha caliente y la obligada siesta. Luego salimos a pasear por esa Maturín, que nos esperaba para mostrarnos su progreso y alegría. Fuimos a comer cachapas hechas en el momento, en uno de los lugares más concurridos por los monaguenses llamado El Sabor Criollo. Seguimos por insistencia de mi esposa a conocer los enormes centros comerciales que hay en la ciudad, comenzando por el Monagas Plaza y por el Petro Oriente, que están uno al lado del otro, para continuar hacia La Cascada, hacia el otro lado de la ciudad. Estos centros comerciales no tienen nada que envidiarle a ninguno que exista en Venezuela. Cuando ya habíamos tenido suficiente emoción y disminuido la billetera, nos fuimos a cenar en el Club San Miguel, justo al lado de nuestro hotel, para terminar la noche en un ambiente romántico y delicioso con la suave brisa de nuestra capital de oriente.
COMO LLEGAR: Maturín queda a 512 kilómetros de Caracas, 222 kilómetros de Puerto La Cruz y 181 kilómetros de Ciudad Guayana. Me gusta ir por tierra, porque tener carro te permite hacer unos paseos buenísimos por los alrededores. Por aire Aserca, teléfono: 0-800-648.83.56, www.asercaairlines.com, aeropostal, teléfono: 0-800-284.66.37, www.aeropostal.com y Conviasa, teléfono: 0-500-26.68.42.72, www.conviasa.aero, ofrecen vuelos al aeropuerto José Tadeo Monagas, que sirve la ciudad de Maturín. DONDE ALOJARTE: El hotel San Miguel es sorprendentemente bueno. He visto pocos lugares de alojamiento como éste en Venezuela, y definitivamente lo mejor de Maturín. Atención esmerada, habitaciones impecables, área de piscina insuperable, precios correctos y ese aire de familia tan difícil de conseguir fuera de casa. Urbanización San Miguel Country Club, Maturín, estado Monagas. Teléfono: (0291) 300.50.00, www.assanmiguel.com DONDE COMER: Cachapera el Sabor Criollo: María González de Gómez es una mujer que le pone mucho amor a todo lo que hace, por eso prepara las mejores cachapas que te puedas imaginar. Compra las mazorcas de calidad, la cortan en sus extremos a mano y luego pasan por una máquina que inventó su esposo, para quitarle las hojas. Por eso su restaurante está siempre lleno de gente, los siete días de la semana. Sería un pecado para los sentidos, ir a Maturín y no comerse una buena cachapa en el Sabor Criollo. Avenida Cruz Peraza, Maturín, estado Monagas. Teléfono: (0424) 919.82.19 NO OLVIDES: Darte una vuelta por el nuevo estadio de futbol de Maturín, que se construyó para la Copa América. Es sensacional. No te pierdas Los Viajes de Montenegro radio, que se transmiten los sábados a las 4:00pm por Pacífica 90.7fm, la emisora de la paz.

lunes, 14 de octubre de 2013

Los mejores saltos de la Gran Sabana

Conozco La Gran Sabana, en el estado Bolívar, desde el año 1970 y cada vez que voy me gusta más. Sus tepuyes son espectaculares, sus paisajes inolvidables y sus cascadas únicas. Hoy les traigo las mejores, para que vayan y las visiten tan pronto puedan. Al viajar en carretera por la Gran Sabana, hay que contar que el kilómetro 0 comienza en El Dorado, y a partir del kilómetro 119 comienzan las cascadas más conocidas con el Salto El Danto, que tiene 35 metros de altura en una garganta escalonada y llena de vegetación. Siguen los encuentros fluviales hacia el sur con los Rápidos de Kamoirán, en el kilómetro 171 de la carretera.
En el kilómetro 201 hay que detenerse a observar uno de los saltos más impresionantes de la Gran Sabana: Salto Kama. La cascada tiene 50 metros de altura y está al lado de la carretera. Al bajarse del carro sólo se observa un riachuelo manso, que desaparece en el horizonte. Pero al acercarse al mirador, se aprecia el impresionante salto que deja boquiabierto a los turistas.
Otro salto muy célebre en la Gran Sabana es la Quebrada Pacheco, justo en el kilómetro 238 de la carretera. Originalmente se llama quebrada Arapán y se compone de dos saltos al borde del camino, ideales para una parada refrescante.
Siguiendo hacia el sur en la vía a Santa Elena de Uairén, está la espectacular Quebrada de Jaspe, en el kilómetro 273. Aquí hay que caminar unos minutos, para admirar una enorme laja de jaspe rojizo por donde cae un río encantador. Con cuidado se puede caminar unos metros por la laja, pero es resbaladiza así que es mejor llevar zapatos adecuados. Desde Jaspe hacia Santa Elena no hay muchos más saltos impresionantes, pero si uno toma el desvío hacia Kavanayén, en el kilómetro 147 de la carretera transamazónica, se puede llegar a otras cascadas espectaculares: Aponwao y Toron-Meru. Para llegar al salto Torón hay desviarse en un letrero del kilómetro 23 de la vía a Kavanayén. Luego, sólo en 4x4, se recorren 17 kilómetros cruzando dos ríos y varios pantanales. La cascada tiene 75 metros de altura y es una de las más atractivas de la Gran Sabana.
El Aponwao o Chinak-Merú, me parece el salto más impresionante de toda la Gran Sabana, porque para llegarle hay que abordar una curiara en un caserío indígena llamado Iboribo. Allí comienza un emocionante recorrido de 25 minutos por el río para llegar al mirador del salto, desde donde se aprecian sus 105 metros de caída libre. Además, puedes bajar al pie del salto y tomar las mejores fotos para el recuerdo. La vía hacia el Aponwao queda en el kilómetro 34 de la carretera hacia Kavanayén y está bien señalada, pero necesitas un 4x4 para llegar hasta el poblado, porque hay varios arenales enormes. La Gran Sabana es uno de esos lugares especiales, que diferencian a Venezuela con todos los demás países del mundo. Vente a conocer sus saltos apenas tengas una oportunidad, que estoy seguro regresarás feliz de este viaje.. COMO LLEGAR: Desde Caracas hasta Santa Elena de Uairén, capital del municipio Gran Sabana del estado Bolívar, hay 1.500 kilómetros aproximadamente. La carretera hacia la Gran Sabana se comienza a contar en el pueblo de El Dorado, famoso por el penal. El paisaje cambia de selva a sabana a partir del kilómetro 130, cuando comienza el espectáculo de tepuyes y valles vírgenes. Santa Elena, ciudad limítrofe con Brasil, está en el kilómetro 315. DONDE ALOJARSE: Si vas con una familia numerosa te recomiendo las Cabañas Kiamanti, teléfono (0289) 995.19.52, donde Mary y Alberto Hernández te atenderán como viejos amigos. Las cabañas son enormes y caben todos. La posada queda en el cerro Akurima, en la entrada de Santa Elena, al lado del terminal de pasajeros. DONDE COMER: Hay pocas opciones para comer en la carretera de la Gran Sabana, aparte de las posadas. En los Rápidos de Kamoirán del kilómetro 171, teléfono: (0286) 951.86.65 funciona un restaurante bastante bueno. En Santa Elena de Uairén la oferta es generosa y variada. Te recomiendo el restaurante Roraima en la avenida Perimetral. NO OLVIDES: Lleva mucho repelente y protector solar, ropa fresca mangas largas, botas cómodas para caminar, zapatos de agua para los ríos, traje de baño tipo short y toallas. No te pierdas Los Viajes de Montenegro radio, los sábados a las 4:00pm por Pacífica 90.7fm.

domingo, 13 de octubre de 2013

Santa Ana de Coro, patrimonio de la humanidad.

Santa Ana de Coro es sin dudas una de las ciudades más bellas de Venezuela y junto a su puerto natural, La Vela de Coro, y a sus imperturbables médanos, ofrece a los visitantes un armonioso conjunto de casas coloniales, leyendas inauditas, historias reales, naturaleza firme y orgullo al terruño que se respira en el aire ardiente de todos sus rincones.
La última vez que fui a Coro quedé dichoso por muchos días, al revivir ese dulce y lejano recuerdo de mi niñez en la cual visitábamos a nuestros familiares en La Vela, compartiendo los secretos deliciosos que llevan a cuestas con naturalidad asombrosa todos y cada uno de esos recios corianos; historias de aparecidos, de la sayona, de las ánimas, del Cristo de las Lovera cuando suda, de familiares acontecidos, de conocidos huyendo, misterios indescifrables y mil cuentos más que forman parte del rico imaginario colectivo coriano.
Al llegar a Coro nos alojamos en el Hotel Miranda, clásico perejimenista que conserva en la piscina su encanto y su alegría de otros tiempos. Después de una buena ducha para reponer las fuerzas perdidas durante el viaje, y de leer un poco las reflexiones morales de La Rochefoucauld, nos fuimos a recorrer el casco colonial de Coro. Tengo la certidumbre que toda alma sensible, si le dan la oportunidad, se conmoverá al ver las maravillas coloniales de Coro: La casa de las ventanas de hierro, la Cruz de San Clemente hecha con el cují del lugar donde se ofició la primera misa en tierra firme venezolana, la bella Catedral que siendo la más antigua de Venezuela recuerda los admirables pasajes de la colonia, el balcón de los Arcaya, el museo Arquidiocesano que alberga maravillas de nuestro patrimonio religioso, el cementerio judío, el balcón de Bolívar y las calles empedradas que tanto evocan la rusticidad bonita de otros tiempos.
Al día siguiente fuimos a La Vela y recorrimos su simple pero bello casco histórico, vimos la Casa de la Aduana, paramos en el sitio donde Miranda enarboló por primera vez nuestra bandera nacional y visitamos el hermoso santuario de Carrizal. Al atardecer tomamos la vía a los Médanos de Coro, donde jugamos con la arena con felicidad infantil, caminamos durante horas por las dunas, observamos a lo lejos los relámpagos de la naturaleza y nos admiramos hasta el delirio por la belleza de nuestra querida Venezuela.
La noche también fue espectacular, porque probamos un carite en escabeche y un chivo al coco sensacional, para continuar con el majarete coriano y el dulce de leche de cabra que nos hizo romper los propósitos y disfrutar aún más la velada. Ven a Coro, trae a tu pareja a esta histórica ciudad colonial y renueva aquí el amor que sientes por ella. Verás cómo te quieren más, después de hacerla conocer nuestros bellos parajes falconianos. COMO LLEGAR: Por vía terrestre desde Caracas son aproximadamente seis horas de viaje, en una carretera relativamente buena. Toma la autopista regional del centro hasta Valencia y luego sigue hacia Tucacas y Puerto Cumarebo, hasta llegar a Coro. DONDE ALOJARSE: El hotel Miranda Cumberland está muy bien situado y representa un clásico de la hotelería falconiana. Hotel Miranda Cumberland Avenida Josefa Camejo, frente al aeropuerto, Santa Ana de Coro Teléfono: (0268)252.21.11 www.hotelescumberland.com DONDE COMER: Comida criolla en la Fonda Turística Sabor Latino, en el Paseo Alameda, en todo el centro de Coro. Teléfono: (0268)252.41.39 DONDE COMPRAR: Artesanía falconiana en el mercado artesanal de Miriam Romero, teléfono (0414)680.72.41, situado en el paseo Talavera con calle Comercio. También encontrará bellezas en La Colmena, una estupenda casa colonial ubicada en la calle Comercio, a unos pasos del mercado artesanal. NO OLVIDES: Llevar ropa fresca y mucho protector solar. Regalarle a tu pareja unas muestras de artesanía falconiana. Comer majarete y dulce de leche de cabra coriano y llevarte las Máximas de La Rochefoucauld para que aprendas a comprender mejor la vida, guiado por la vasta inteligencia de este noble escritor francés. Los Viajes de Montenegro radio se transmiten los sábados a las 4:00pm por Pacífica 90.7fm, www.pacifica.fm.